© Todos los derechos reservados
Si tuviera un gato de mar, sería como este... El viviría en la casa de la playa, porque necesita estar en contacto frecuente con el mar. Yo tendría la excusa ideal para escaparme más seguido a la playa.... o mudarme!
Habitar papeles, cartón, madera y paredes con mis trazos y mis colores, ha sido una manera de mantenerme enfocado, superar el aburrimiento de la monotonía (interna y externa) y recuperar mi equilibrio emocional en situaciones de conflicto. Así me ocurre también cuando rasgo mi guitarra.
No tengo formación como artista plástico. Lo que hay en mis obras es la pura expresión creativa que surge cuando me enfrento a la incertidumbre del espacio en blanco, a la incertidumbre de un momento de mi vida.
Ver más información de Dunas