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La obra creada con técnica mixta en el año 2012, presenta una narrativa visual emotiva a través de la representación de dos corazones. Uno de ellos está cubierto de espinas, simbolizando el dolor, el encierro y las heridas del pasado, mientras que el otro, más débil y menos dañado, es el sanador, el liberador. La proximidad de ambos corazones, provoca que la dureza y las espinas comiencen a caer, revelando una piel sana, además de surgir un líquido verde que simboliza el sacrificado proceso esperanzador. "Nunca es tarde" transmite un mensaje de esperanza, de liberación y de cambios. A través de la interacción y el apoyo mutuo, incluso los corazones más heridos pueden sanar y renovarse. La obra invita al espectador a reflexionar sobre el poder del amor, la evolución personal y la esperanza para superar las adversidades y encontrar la sanación. Nunca es tarde para dejar entrar y revivir. Los trazos en la obra son más dinámicos y confusos en las figuras así como los contrastes de luces y sombras donde se mezclan pastel y lápiz para resaltar las texturas de los cálidos corazones que contrastan con el frío fondo azul de sueltas pinceladas que nos sumergen en la profundidad emocional del dibujo.
Reinier García Hernández, 1985, La Habana, Cuba
Graduado de Bachiller en Humanidades e Instructor de Artes Plásticas y Licenciado en Educación en la Especialidad de Instructor de Arte. Durante 18 años impartió talleres de creación y de apreciación en la Casa de Cultura "Genaro de la Rosa" y en dos escuelas en el municipio San José de las Lajas, Mayabeque. Ha participado en variadas exposiciones y eventos culturales. Es amante del dibujo donde a través de trazos, manchas y contrastes, da vida a obras que tocan el corazón.
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