La obra pictórica de Camilo Hernandez, expresa de una manera muy actual su interés por las bases más clásicas de la pintura: el color y la figura humana. Su búsqueda visual se compone de una paleta solida y vibrante, de figuras que se mueven entre lo urbano y lo surreal. Cuerpos que parecen derretirse en el canvas para convertirse en otras cosas, en texto, en nubes, en líneas, en puntos, en gestos...