Soy mexicana, empecé a estudiar escultura hace aproximadamente 10 años, lo disfruto enormemente y siento mucho no poderle dedicar más tiempo a algo que me llena un gran espacio interior, adoro sentir en mis manos los materiales que uso para lograr las piezas y ver cómo poco a poco ván tomando forma mis ideas, trabajar en una escultura es siempre un reto, un nuevo descubrimiento y un alimento para el espíritu.