Sus primeros pasos los dió en Madrid; con seis años se trasladó con su familia a Salamanca, Sevilla y vuelta a Madrid
Su dedicación constante a los “puntos gráficos” le abrió un abanico de posibilidades con los pigmentos, bastidores, mezclas, colores,... Empezó a participar en exposiciones colectivas, como la de Nueva York, Montserrat Gallery (Soho 2001) y realizar exposiciones individuales.