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Tejas y más tejas. No es una obsesión. Es lo que sé hacer. Y es laborioso. Buscar un tejado ruinoso, elegir las que estén bien, limpiarlas intensamente, perforar los vanos antes de hacer los dibujos (si se rompe la teja que sea antes de empezar a pintar para no perderlo todo), aplicar tapaporos para que el óleo y las líneas se definan bien, y aplicar la imaginación y todos lo demás. Y esperar a que se sequen, que el óleo es muy pesado en esto del secado. Hay que colocar una cuerda para colgar la teja donde nos interese, y a lucirla. Eso es todo
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