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En los manglares las ramas y raíces de los árboles pareces entrelazarse como si fuesen redes de pescadores. Fue en estas redes que encontré la solución a un planteamiento para en cual le había venido buscando forma.
Los seres humanos no existen por aparte, esta ligado a todo lo demás y sus acciones afectan tanto a la raza humana como a todo lo demás. Con esto quiero decir que, al igual que las ramas de un manglar, el destino forjado de un ser humano puede modificar el destino de otro u otros seres.
He hecho varios cuadros de este tipo, experimentando con distintos colores y composición.
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