bárbaros las ideas no se matan

• País: Argentina
• Categoría: Escultura
• Materiales: Piedra
• Temática: Figurativa
• En Artelista desde: 14 de mayo del 2008
• Etiquetas: grito, desesperacion, realidad, nuestros

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Orificio de salida, grito gigante descomunal contra la barbarie humana, ojala remueva los intestinos de quienes cometen estas atrocidades, ojalá se nos arrime la paz y el amor.BARBAROS LAS IDEAS NO SE MATAN:

Hace tan poco y "hace siempre" que vimos y vemos éstas cosas. Estamos en medio de una guerra de ideas, no debemos olvidar de lo que es capaz el enemigo, no para tener miedo (síntoma de la conciencia), no para ajusticiar (para eso debemos exigir eficiencia en la justicia, a ese poder que mantenemos con nuestro esfuerzo), no para claudicar ( estamos en medio de una esperanzadora alborada).
Así lograron acallar a muchos de los nuestros, camaradas. El explotador desea eliminar a quienes le quitan sus privilegios, mascullan desde oscuros rincones. Ya han practicado mucho tiempo el típico escopetazo en la nuca.
¿Cómo? ¿Que mostrarlo es cruel? ¿Morboso? ¡Nooooo! solo real, histórico, doloroso, ¡ojala sepamos evitarlo!

¿Y esa estaca de duro hierro en medio de la cabeza?¿ No es acaso así como nos incrustan falsas ideas, no es así como los medios nos penetran tantas veces sin darnos cuenta?. Ideas mediáticas que se ensañan con los más débiles, que están pensadas para ellos. Para domesticarnos silenciosamente. Guerra de ideas.
Y si no pueden doblegarnos con las ideas de la sumisión, de la culpa, del no te metas, del” algo habrá hecho”, del " ¡que vas hacer, es el destino!", o ese otro del "todo está escrito", o si no el de “paciencia, tenés ganado el cielo", también nos manejaron con los pecados (hasta por haber nacido), bueno y si no pudieron con esas herramientas, sacan la ITACA y te vuelan las ideas.
A cuidar con celo lo logrado, a trabajar sin descanso. A bañarse en las miles de sonrisas de niños que comen, que juegan, que ven a sus padres en la dignidad del trabajo. A sentir el suave aroma del agradecimiento de nuestros débiles por sentirse protegidos.
A no olvidar. A soñar con los ojos muy abiertos.
Eduardo.