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La mujer y el horizonte pueden tener el mismo atractivo; pero la mujer es mas real y más concreta, podría escaparse.
El universo vive en nosotros y halla alas en nuestro pensamiento para conocerse a sí mismo. Somos más nuestras huellas que nosotros mismos, somos polvo con alas que en breve tiempo no obedece al viento, somos seres efímeros y al mismo tiempo casi eternos.
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