Aquí se representan las tres virtudes necesarias para la creación. Lo que se considera las tres herramientas necesarias para la mano de un artista en general y la virtud humana en particular. Usando como referente los caballos de bronce de la Piazza di San Marcos de Venecia se muestra una alegoría a las tres grandes virtudes: técnica, corazón e inspiración.
El texto inscrito:
\"Quien hace una cosa, existe en cierto modo mediante el acto mismo. Así ama su obra porque ama igualmente su existencia, sentimiento que es muy natural, porque lo que existe en potencia, la obra lo revela, lo muestra en acto.\"
Aristóteles
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