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En mis obras, me gusta trabajar con la relación entre el ser humano y la Naturaleza. En este caso, la escultura se rompe en dos representando de forma metafórica la Maternidad en su más amplio concepto.La piedra se divide en dos, respetando las simetrías de una pieza y otra, al igual que dos seres humanos comparte ADN y son similares, pero diferentes. La segunda piedra, pende con apariencia frágil de la pieza matriz, que es la que le aporta el equilibrio y la invita a tener identidad propia, creando un efecto de suspensión en el espacio.
Escultura realizada con markol al-mariyat.
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