La mujer blanca como un elemento de adoración del hombre que cayó bajo su embrujo, ella con cierta fría indiferencia se deja querer no ajena al juego de la seducción. La luz exterior baña su blanco cuerpo, el hombre bebe de su luz.
El arte no es para mi una profesión, ni siquiera un oficio, es simplemente una forma de ser y de vivir, un espacio en cual me siento a salvo, un escape de la locura, una canalización de mis emociones e instintos, un apartarme del ruido estéril, un intento de construir un universo complementario, un experimento de creación de imágenes propias, un liberarme de ellas y entregarlas por si a alguien le llegan.Y fundamentalmente la tentativa de plasmar...
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