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El árbol del Peón, como el individuo que está jugando aquí su papel en el mundo.
Este peón está abierto al infinito, por la parte de arriba le entra el amarillo, que es la inteligencia.
Aceptar tal y como somos y captar sin autolimitarse.
Esta serie está pintada con pigmentos naturales puros, un material muy difícil y delicado de manejar, al que hay que dedicarle mucho tiempo y años de experimentación, es duradero y de primera calidad, además de ser ecológico todas las herramientas se limpian con agua y carece de olor, es mucho mejor que usar aguarrás y la pintura al óleo tan perjudiciales a la salud. Además el arte final produce un resultado más que notable por la fuerza vibrante sus colores sobre la tela. Que gana muchísimo cuando se ve en presencia, ya que se puede incluso percibir una fina textura parecida a la piel de melocotón.
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