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Ya desde la creación aparece la soberbia como el principal y más grave pecado.
El primero en desafiar a Dios es Lucifer, ser creado de luz, su orgullo desmesurado no le permite doblegarse ante Adán, surgido del humilde barro.
Se revela contra el ejército de Dios, siendo derrotado y cayendo a los infiernos.
No desistirá en su empeño de corromper a su envidiado enemigo Adán, ofreciéndole la manzana del mal a través de su compañera Eva. Ellos también sucumben al deseo de controlarlo todo, incluso por encima de Dios, su creador.
La soberbia, el deseo desmesurado de ser el más importante y valorado a costa de todo, sin importar el precio, se ha dado en el ser humano a lo largo de la historia. Los principales tiranos surgen de este instinto de posesión y control absoluto de todo, de este afán de poder inmesurable. Ellos se consideran \"el único dios \".
Dante, en la Divina comedia, baja a los infiernos acompañado del poeta Virgilio, y observa como es el castigo de los soberbios, ellos van cargados de pesos en sus espaldas, que les impiden incorporarse y levantar la mirada. Permanecerán eternamente agachados espiando su pecado.
El ajedrez representa en mi obra el afán de poder, el rey domina a todos, los demás caen a su alrededor.
La humildad es la virtud contra este pecado, aunque sí es cierto, que el esfuerzo y las ganas de crecer y superarse, se consideran también virtudes necesarias en el ser humano, siempre que no supongan pisotear al compañero para conseguirlo.
Aunque todas las religiones y culturas contemplan los pecados capitales, no en todas se les trata con la misma importancia. Son instintos en el hombre necesarios e inevitables, que le ayudan en algunos casos, pero que como tales debe aprender a controlar.
Recuerdo una caja enorme de acuarelas como el mejor regalo de mi infancia.
No sé exactamente desde cuando las imágenes y los colores forman parte de mí, de mi forma de expresarme, pero si sé que los necesito en mi vida.
Siempre tuve claro que sería pintora. Completé mi formación autodidacta con estudios de Bellas Artes en la universidad Complutense de Madrid. Compartir ahora experiencias artísticas con mis alumnos enriquece mi universo.
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