El cuadro pertenece a una serie del mismo título. En ella reflexiono sobre la irrealidad de la propia vida, sobre la extrañeza que a veces provoca el existir. Los niños protagonistas de estos cuadros se nos muestran más o menos inconscientes de las imágenes que les rodean, imágenes que conforman un collage de muerte y vida. Al igual que nosotros viven en una realidad que apenas pueden comprender, sólo quizás contemplar. Como nosotros están abocados a la certeza de la muerte y como nosotros sienten la perplejidad que supone vivir. Parece como si sólo fueran meros espectadores de su propia historia, casi imposibles protagonistas de su propia existencia.
See more information about Pilar López Báez
Problems finding what you are looking for? At artelista we inspire you